El viaje que el Ferrari Club España organizó para primeros de septiembre, fue pensado para que nuestros socios pudieran disfrutar de la conducción de sus Ferrari, y a la vez, conocer de cerca una de las zonas vitivinícolas más importantes de Francia, “La Champagne”, una denominación con la que se bautizan algunos de los espumosos de más prestigio, calidad y bouquet del Mundo.
Situada al noreste de París, su impresionante paisaje está marcado por más de 35.000 hectáreas de viñedos, el 75% de los cuales están dedicados a la denominación Champagne. Pero esta celebre región francesa, no solo destaca por sus afamados vinos, sino también por su rico patrimonio histórico y cultural, del que destacan su capital, Châlons-en-Champagne, una ciudad que conserva todo su espíritu medieval, repleta de numerosos canales y edificaciones históricas, declaradas patrimonio mundial de la UNESCO, y Reims, en donde sobresale su imponente Catedral gótica del siglo XIII, conocida como Nuestra Señora de Reims.
Con este seductor programa por delante, comenzamos el viaje dirección a Francia partiendo del Área de Servicio Porta Catalana de la Autopista AP-7, en La Junquera, lugar de concentración al que acudieron todos los socios inscritos en el viaje.
Después de una parada para comer, continuamos viaje por la Autopista dirección Vonnas, donde haríamos noche en el Hotel Georges Blanc & Spa, después de cenar en el orónimo Restaurant, de 3 estrellas Michelin, donde se nos sirvió un Menú Especial para los miembros del Ferrari Club España.
Ya en el Hotel y de madrugada, desde la habitación de nuestro amigo y socio del club, Silvestre Ramón, su esposa avisó que su marido estaba sufriendo un infarto. Acudieron rápidamente los socios Manel Vilanova y Manuel Urquijo que trataron de reanimarlo. Los servicios médicos de urgencia llegaron tempestivamente a continuación, aunque les fue imposible estabilizarlo, certificando el fallecimiento en la habitación.
En medio del dolor y la incredulidad de todos por lo sucedido, se habló de suspender el viaje, pero el responsable del evento, el Sr. Félix Buget, decidió asumir la labor de comunicar la triste noticia a la familia Ferrarista y de quedarse y junto a los socios Pablo Marco, Manuel Urquijo y sus esposas, ayudar a Silvia, con los largos y penosos trámites de repatriación de Silvestre.
El resto de socios decidieron continuar con el viaje, como homenaje a su amigo fallecido.
Así a primera hora de la mañana y bastante afectados por lo sucedido, salimos con nuestros Ferrari dirección a Troyes, donde a nuestra llegada poco antes del mediodía, aparcamos nuestros coches en un parking vigilado. En Troyes realizamos una visita guiada por el centro histórico y más tarde almorzamos en el Restaurant Auberge Sante Maure, en las afueras de la localidad.
Después de la comida, pusimos rumbo a Reims, para dirigirnos a nuestro lugar de concentración, el Hotel Domaine de Crayeres. Una vez instalados dispusimos de la tarde libre, para poder pasear o hacer turismo, o visitar alguna bodega de la zona de Epernay fuera de programa.
Por la noche celebramos una cena de gala en el Restaurant Le Parc (dos estrellas Michelin), situado en el mismo hotel, donde se nos sirvió un menú exclusivo para nosotros preparado por su afamado Chef.
El sábado por la mañana nos dirigimos a Reims, donde visitaríamos las célebres bodegas Mumm. Una vez estacionados nuestros Ferrari en el parking de las bodegas, un micro bus nos
recogió para realizar una visita guiada a la Catedral de Nôtre Dame de Reims, para luego regresar y visitar, la que podría calificarse de las más importantes y antiguas bodegas de región de la Champagne, las bodegas Mumm.
Allí pudimos conocer muchos de los secretos de la producción de sus distintos vinos y espumosos, que completamos con una degustación.
Pasado el mediodía salimos al volante de nuestros Ferrari, hacia Verzenay, donde se nos sirvió una comida exclusiva a base de maridaje con Champagne, en el Molino de Verzenay.
Una vez completado el almuerzo, regresamos al hotel, donde la organización había previsto disponer de la tarde libre, para que cada uno eligiera o bien descansar, o aprovechar el amplio abanico de posibilidades que nos ofrecía nuestra cercanía a Reims, como ir de compras, o visitar el antiguo Circuito de Reims, el Museo automovilístico, o el Palacio de Tau, la Villa Demoiselle o el Museo de la Rendición.
Por la noche y con todos los socios ya en el hotel, celebramos la cena de despedida en el Restaurante Le Jardin, situado en el parque del mismo hotel.
El domingo por la mañana y después de desayunar, se ponía fin al evento con el regreso de todos los socios a sus respectivos puntos de origen.
© 2019 Ferrari Club España